¿Te has fijado como una hoguera al transmitir calor reúne a las personas?
Pues precisamente por eso al lugar que habitamos se le llama Hogar.
Y resulta que a nuestra casa la llamamos hogar, porque dentro de ella hay una cocina con una estufa donde preparamos nuestros alimentos al calor del fogón.
Así debe ser la Gastronomía, como una hoguera: motivo de reunión, de convivencia, de calidez.
Aún en las ocasiones en que no haya con quien compartir los alimentos, por las razones que sean, es de vital importancia sentarnos a una mesa con toda la dignidad que merecemos, y servir los alimentos que consumiremos "como Dios manda", porque sucede que cuando estamos sólos (y aquí me incluyo) solemos descuidarnos y no darnos la importancia que merecemos, por lo que sugiero algunas ideas para lograr el objetivo propuesto:
Escucha música mientras comes, acompaña tus alimentos con una copa de vino, si tienes un jardín, corta algunas flores para tu mesa, utiliza tu vajilla elegante. No esperes que sea día de fiesta para sacarla. ¿Qué no es suficiente motivo tener vida para festejar cada día, ya sea con alguien más, ya sea con nosotros mismos?
Para poder respetar a los demás, debemos comenzar por respetarnos a nosotros mismos, y con la dignidad que sirvamos los alimentos que consumimos demostramos en gran parte el respeto que nos damos a cada uno y a los demás.
Así que una vez más: manos a la obra!!!
Pues precisamente por eso al lugar que habitamos se le llama Hogar.
Y resulta que a nuestra casa la llamamos hogar, porque dentro de ella hay una cocina con una estufa donde preparamos nuestros alimentos al calor del fogón.
Así debe ser la Gastronomía, como una hoguera: motivo de reunión, de convivencia, de calidez.
Aún en las ocasiones en que no haya con quien compartir los alimentos, por las razones que sean, es de vital importancia sentarnos a una mesa con toda la dignidad que merecemos, y servir los alimentos que consumiremos "como Dios manda", porque sucede que cuando estamos sólos (y aquí me incluyo) solemos descuidarnos y no darnos la importancia que merecemos, por lo que sugiero algunas ideas para lograr el objetivo propuesto:
Escucha música mientras comes, acompaña tus alimentos con una copa de vino, si tienes un jardín, corta algunas flores para tu mesa, utiliza tu vajilla elegante. No esperes que sea día de fiesta para sacarla. ¿Qué no es suficiente motivo tener vida para festejar cada día, ya sea con alguien más, ya sea con nosotros mismos?
Para poder respetar a los demás, debemos comenzar por respetarnos a nosotros mismos, y con la dignidad que sirvamos los alimentos que consumimos demostramos en gran parte el respeto que nos damos a cada uno y a los demás.
Así que una vez más: manos a la obra!!!